miércoles, 2 de octubre de 2013

II República. Revolución y contrarrevolución en una comarca granadina. Ahama (1930-1954)









PEDIDOS A: historiadealhama@gmail.com

Presentación del libro en el Ayuntamiento de Alhama

Segunda República. Revolución y contrarrevolución en una comarca granadina. Alhama (1930-1954)
Grupo de Investigación Filosofía y Antropología de la Universidad de Granada.
2ª  edición. 2013.
Autor: Salvador Raya Retamero.
Puntos de venta: en Granada, librerías Atlántida, Babel y Picasso. En Alhama, librería Ruiz.
PVP: 40 euros.
Nº págs.: 2 vols., 968.
 SINOPSIS:  El libro analiza los años más negros de la historia de España. De una España no sólo en blanco y negro sino cavernícola donde se alcanza la apoteosis de los descalabros y de la represión. No sólo se asiste en el período a la destrucción del patrimonio nacional de la manera más letal e inútil, sino que se trata de un período en el que se cometen crímenes horrendos, crueles, abominables… por mantener una ideología política o religiosa determinada y a veces sin ellas. El autor huye de la visión conductista habitual que centra el análisis en una represión o en otra para alcanzar un resultado preconcebido políticamente. Abraza todo el período en el que van desfilando desde 1930  hasta 1954 las desventuras de los intervinientes en aquel desencuentro nacional.


            El libro se divide en 5 capítulos repartidos en dos volúmenes. En el primer volumen se aborda la génesis del proceso revolucionario en España, la generación de ideologías extremas de izquierda y derecha hasta la eclosión del proceso revolucionario, el anticlericalismo y los decretos de depuración ideológica marxista. El segundo capítulo aborda el período (1930-1936) centrado en la comarca desde el ocaso de los años 20, la proclamación de la República y los distintos gobiernos republicano-socialistas y de Acción Popular. El tercero se denomina La Revolución acelerada y abarca desde las elecciones de febrero de 1936 al levantamiento militar. Se centra en el Ayuntamiento del Frente Popular, la génesis de la confrontación anunciada, la toma de la comarca por las milicias anarco-marxistas, la represión y el terror revolucionario y las Víctimas de la represión marxista. El cuarto capítulo analiza la ofensiva contrarrevolucionaria, la ocupación de la comarca Alhama por los nacionales , los primeros acuerdos municipales, la depuración y represión franquista , como otras víctimas atribuidas erróneamente a la represión franquista.
                El segundo volumen es el dedicado a la dictadura franquista y a la postguerra(1937-1954) se detiene en la génesis de la comisión gestora municipal de Alhama, los aspectos socioeconómicos de la autarquía, la reforma agraria, la creación de nuevas poblaciones e infraestructuras, y en dos procesos simultáneos cronológicamente de gran impacto en la comarca: la División Azul y los Maquis, el bandolerismo y la guerrilla. El libro termina con unas conclusiones generales y un apéndice documental  que desgrana 31 documentos. Aporta también testimonios orales, documentales y fotografías inéditas de gran valor histórico. El autor deja abierto el para nuevas ediciones que puedan incluir las aportaciones que los ciudadanos puedan realizar en todo los órdenes como especialmente en lo relativo a las represiones marxista, franquista y guerrillera.
 Contenido

VOLUMEN  I 
 INTRODUCCIÓN
 I. PROLEGÓMENOS DE LA REVOLUCIÓN EN ESPAÑA
1. El terrorismo anarquista en la génesis de la centuria
2. La difusión de ideologías violentas
3. La instrumentalización política de la violencia
4. La deriva de la dictadura marxista: el jaque mate de la República
5. El clima revolucionario y la actividad del Frente Popular
6. 1936: La ansiada revolución proletario-socialista
7. El anticlericalismo
8. La depuración ideológica marxista
 II. EL PERÍODO PRERREVOLUCIONARIO (1930-1936)
 1. Vida cotidiana y municipal en el ocaso de los años veinte
 2. Proclamación de la República en Alhama y su comarca
 3. El bienio reformista en el Ayuntamiento republicano
 4. Crisis de la conjunción republicano-socialista y Acción Popular
 III. LA REVOLUCIÓN ACELERADA
1. El Ayuntamiento del Frente Popular: la revolución marxista
2. Génesis de la confrontación anunciada
3. La toma de la comarca por las milicias anarco-marxistas
4. La represión y el terror revolucionario
5. Víctimas de la represión marxista en la comarca
6. Declaraciones testificales de algunos asesinatos
7. Relación de ejecutados por la revolución
 IV. LA OFENSIVA CONTRARREVOLUCIONARIA
1. La ocupación de la comarca Alhama por los nacionales
2. Los primeros acuerdos municipales
3. Depuración y represión
4. Aproximación a los totales de la represión franquista
5. Relación de las 91 bajas resultantes de la guerra civil en Alhama
6. Causas y consejos de guerra por poblaciones
7. Otras víctimas atribuidas a la represión franquista
VOLUMEN II
 V. DICTADURA Y POSTGUERRA (1937-1954)
1. La comisión gestora municipal de Alhama
2. Aspectos socioeconómicos de la autarquía
3. Reforma agraria, nuevas poblaciones e infraestructuras
4. La División Azul
5. Maquis, bandolerismo y guerrilla: la gente de la sierra
 CONCLUSIONES GENERALES
 APÉNDICE DOCUMENTAL
1. 1936, julio, 17. Tetuán. Discurso de Franco
2. Informe sobre las pérdidas y daños sufridos por el tesoro artístico
       3. Informes parroquiales sobre lo sucedido durante la República
4. Segundo avance del informe oficial sobre los asesinatos, 1936
5. Quinto Avance del informe oficial sobre los asesinatos, 1936
6. Informe del párroco de Alhama a la llegada de los nacionales
7. 1937. El año de la “corría”
8. Revolución española de 1936 y revolución alemana de 1917-918
9. Discurso del general Yagüe, Burgos, 19 de abril de 1938
10. Causa General. La dominación roja en España
11. Catite: Vida, muerte y resurrección
12. Decreto sobre la prescripción de los delitos anteriores a 1939
13. ¿Quién mató a Muñoz Seca?
14. Don Luis Ruiz López, víctima de secuestro
15. Una niñez dolorida
16. El miedo en mi infancia
17. Informe de la Guardia Civil por secuestro de bandoleros
18. Mis ocho años en aquel verano del treinta y seis
19. El bandolerismo en el cortijo de los Nacimientos
20. El miedo a los bandoleros en mi infancia
21. Retazos de la guerra civil en la memoria
22. Mi padre fue José López Triviño, alcalde de Alhama hasta 1936
23. Recuerdos de unos dramáticos años
24. Comandante General de Ingenieros del Ejército de Andalucía
25. Otra memoria histórica
26. El pueblo (Játar, 1936)
27. El Semiramis navega sin novedad
28. Testimonios sobre la guerra civil en Alhama de Granada
       29. José Zamora Martínez (1907-1974)
30. Acta de reunión del comité de enlace de Alhama
31. A bordo del Semíramis
BIBLIOGRAFÍA
FUENTES DOCUMENTALES Y ORALES
ÍNDICE

PRESENTACIÓN DEL LIBRO DE
SALVADOR RAYA RETAMERO
El acto tendrá lugar en GRANADA el día 15 de FEBRERO de 2013 a las 7 de la tarde
En la BIBLIOTECA DE ANDALUCÍA
Y en
ALHAMA EL DÍA 2 de marzo de 2013 a las 6 de la tarde
En el salón de plenos del Ayuntamiento

Será presentado por el profesor don Juan Larios Larios
y elhistoriador don José Montero Corpas


Otros enlaces sobre el libro:

Salvador Raya Retamero, II República: revolución y contrarrevolución:




 Presentación del libro de Salvador Raya “Segunda República: Revolución y Contrarevolución en una Comarca Granadina. Alhama (1930-1954)

ayuntamientodealhama.com/noticias/cultura/891-presentación-del-libro-de-salvador-raya-“segunda-república-revolución-y-contrarevolución-en-una-comarca-granadina-alhama-1930-1954.html



(De izquierda a derecha) el autor y los profesores Larios Larios y Montero Corpas. Biblioteca de Andalucía Granada



(De izquierda a derecha) el autor, el alcalde de Alhama, don Francisco Molina, y los historiadores Montero Corpas y Larios Larios
            
             Palabras del autor

             Preámbulo
         En primer lugar, queremos dar las gracias a la Dirección de laBiblioteca de Andalucía por la cesión de este espacio para la presentación del libro.
         En segundo lugar, agradecer la presencia de todos ustedes y de las personas que nos han brindado su colaboración y han completado el contenido de este libro con sus aportaciones orales, documentales o fotográficas, a las que no podemos nombrar por ser una lista bastante amplia, pero que aparecen todas recogidas en los agradecimientos correspondientes. También a quienes meacompañan en la mesadon Juan Larios Larios y a don José Montero Corpas, con ellos nos une, además de la profesión y la labor de investigación, la amistad la pertenencia a una misma región. El primero hunde sus raíces paternas maternas en Alhama y el segundo, en la vecina población de El Salar. Y ambos han aportado material importante para este libro, que sin duda lo ha enriquecido. El profesor Larios Larios, especialmente, con un importante repertorio fotográfico que ayuda a conocer mejor la época y la sociedad de postguerra: fotografías que pasan a tener de esta forma el rango de históricas. El historiador Montero Corpas, también ha aportado algunas fotografías y especialmente nos ha animado a ampliar el capítulo dedicado a la gente de la sierra, que nunca lo pensamos tan amplio y nos facilitó material tanto documental como bibliográfico. Por todo ello, gracias a ambos. 
         El porqué de este libro. Viene a completar la secuencia histórica que iniciamos hace varias décadas. De esta manera finalizamos la secuencia histórica completa que encierra la comarca estudiada, que como hemos manifestado hunde sus raíces humanas en el Paleolítico medio y poblacionales en los dos últimos milenios. 
         Título. En marca la línea de la investigación seguida por nosotros: Revolución y contrarrevolución. 
         Lapso cronológico. Se trata de los parámetros en los que hemos desarrollado la investigación, circunscritos a los años comprendidos entre 1930 y 1954, como hemos manifestado los más sórdidos años de la historia de España, de una España cavernícola, en blanco y negro, sin lugar a dudas, porque desde 1931 se van a desarrollar las tropelías mayores y crueldades más degeneradas que se puedan recoger en los anales de la Historia. 
         Hemos seguido un desarrollo cronológico e histórico bien claro, huyendo del análisis histórico focalizado en un período restringido arbitrariamente: (1930-1954), para que el lector pueda relacionar causas y consecuencias por él mismo, sin conducción ideológica o política alguna. El tema lo dejamos abierto pues esperamos completarlo con todas las aportaciones que los ciudadanos quieran realizar, para ello remitimos en el mismo libro a la dirección de correo electrónico: historiadealhama@gmail.com 
         Terminología. Desde el punto de vista terminológico hemos abordado los términos hordasnacionalpersona de ordenguerrillerobandolero, nacionalista, y hemos comprobado cómo se está vaciando el contexto histórico y descontextualizando los hechos de una manera alarmante, atentando contra los principios más elementales de la Historia… 

         La Ley de memoria histórica 
Especial importancia ha tenido en el resultado final el material obtenido tras la desclasificación  documental al hilo de la Ley de Memoria histórica de noviembre de 2009, por la cual quedaba expedito el acceso a los miles de rollos y legajos donde se conservaban actas, resoluciones y sentencias de los consejos de guerra y los juicios celebrados en España durante la Guerra Civil y el franquismo, tras la aprobación por el Consejo de Ministros delReglamento de Archivos Judiciales Militares y la regulación del acceso público a dichos fondos, blindados con anterioridad por laLey de Secretos Oficiales de 1968. 
En la actualidad, la generalidad de documentos emanados de la actividad del bando nacional se puede consultar incluso en la web y, por consiguiente, puede ser libremente criticada y valorada, como es el caso de la Causa General o el Fondo de Responsabilidades políticas, pero, hay que reconocer, que ha quedado desprotegida la intimidad de una amplia generalidad de ciudadanos de ambas Españas, que pueden contemplar atónitos cómo los nombres de sus ascendientes -sus aventuras, desventuras, asesinatos, declaraciones y atrocidades cometidas- son divulgadas con el beneplácito del Estado, ante la mengua del secreto administrativo producida.
En verdad, tal vez, se haya procedido con excesiva diligencia, aunque una vez la documentación desclasificada, ha de ser abordada por el historiador. Deseable hubiese sido la conservación de su correlato en la represión marxista.
Intentando salvaguardar más que el Estado la intimidad personal hemos abreviado aquellos nombres, que aunque públicos en los archivos históricos nacionales y provinciales, no se encuentran en la Web. Los que sí se encuentran en la Web, nos pareció sin sentido abreviarlos.

Petición Al Gobierno de España y al de la Junta de Andalucía sobre la consideración de nuevos lugares de memoria histórica 
Tras la Ley de Memoria histórica han proliferado los espacios señalizados por las distintas Administraciones relativos generalmente sólo a una parte de las víctimas, es por ello que desde aquí, elevamos nuestra petición a la Presidencia del Gobierno de España, al Presidente de la Junta de Andalucía y al Presidente de la Memoria histórica de Andalucía para que éste último eleve con nosotros a los anteriores la petición de considerar, a fin de evitar discriminación alguna entre las víctimas del conflicto civil, otros lugares de memoria histórica como los siguientes: 
Todos los lugares de Andalucía y España donde fueron ejecutados ciudadanos por sus creencias políticas o posición económica. 
Todos los conventos e iglesias incendiadas y otros lugares donde fueron ejecutados ciudadanos andaluces y españoles por sus creencias religiosas.
Todos los conventos e iglesias incendiadas y otros lugares destruidos, archivos, etc., donde fueron ejecutados ciudadanos por sus creencias religiosas.
Todos los lugares y espacios donde fueron ejecutados ciudadanos por sus ideas políticas y religiosas o sin ellas, por la represión marxista o franquista.
Y en concreto, por lo que respecta a la comarca estudiada:
Alhama de Granada: calles, plazas, carreteras y cementerio.
Arenas del Rey.
Santa Cruz del comercio.
Jayena.
Las Revueltas de Santana, en Zafarraya.

     Contar todo. Tratamos de esta forma de posicionarnos frente a lo que consideramos una simplificación de la realidad histórica:queremos contar lo que se cuenta habitualmente y lo que no se cuenta. Focalizar la investigación en un período absolutamente reducido, en Historia, pierde todo su sentido y rigor y responde a un maniqueísmo irresponsable en algunos casos. Ello sucede por ejemplo, cuando se analiza sólo una represión de las que forjaron el conflicto civil. O en el caso de la gente de la sierra no se atiende siquiera a sus víctimas, ni a las generadas en sus propias filas a causa de la represión interna. 
         En esta línea, hemos tratado de denunciar la repetida omisión en la generalidad de la historiografía actual de la represión marxista frente a la insistencia sobre la franquista, pero abordando ambas en este libro. 
         Denunciamos igualmente la notable inexistencia de estudios históricos y artísticos que se centren en la destrucción sufrida por el patrimonio nacional a lo largo de los años 31-34-36…, como en su reconstrucción, al menos en proporción similar a sus antípodas. 
         Y en esta línea, hemos afrontado el tema de la guerrilla, de la gente de la sierra o bandolerismo, que estas y otras denominaciones le han sido comunes; pero también abordamos a las víctimas de los mismos. 
         Porque huimos de una simplificación conductista de la Historia que obedece sin duda a un rumiar melancólico de ideologías trasnochadas apóstatas de la democracia. En algunos libros de texto hemos encontrado los antecedentes de la guerra civil circunscritos a lo siguiente: unos pistoleros falangistas asesinan al teniente Castillo, que días antes había disparado contra un joven tradicionalista, y al día siguiente como represalia, unos guardias de asalto asesinan al diputado Calvo Sotelo. Estos asesinatos serían el detonante del levantamiento de los rebeldes
       Ante un reduccionismo semejante que olvida la situación de injusticia social, de paro obrero y la incapacidad de los gobernantes para solventar la situación, el espoleo del anticlericalismo, los incendios desde 1931, los asesinatos y la revolución del 34, los magnicidios políticos de los anarquistas del primer tercio del siglo XX…, hemos querido por ello contar lo que se cuenta habitualmente y lo que no se cuenta, circunscrito todo a la comarca estudiada, que creemos fiel reflejo de lo sucedido a nivel nacional. 
         El libro no trata de demostrar nada, ni de explicar nada, sólo certificar la evidencia. Explicar lo evidente siempre nos pareció ridículo y fuera de lugar. Hemos intentado que todo lo oculto salga a la luz. 
         Desmitificar. Se han mitificado en exceso los logros de la 2ª República y se han disculpado y minimizado en exceso sus graves errores. Por momentos, también hemos tratado de desmitificar, porque todo lo que es mito no es historia. A veces, incluso, las mismas loas a la República hace que se confunda el sistema político de una República liberal, democrática y occidentalcon las marxistas y soviéticas y llega la confusión hasta nuestros días, considerando luchadores de la libertad y democracia a quienes no luchaban precisamente por esos valores.
         Todo ello hace, incluso, que se obvie absolutamente la represión marxista y sólo se le dé carta de naturaleza a la franquista. Nosotros mismos hemos comprobado el extremo de que niños de la ESO nos han llegado a preguntar si era cierto que Franco quemaba a la gente en la hoguera.
   A todo ello, no se puede más que contestar con la desmitificación del mito que se viene realizando hasta ahora. En esta línea citamos reiteradamente, por ejemplo, el libro el Ejército guerrillero de Andalucía de Rodríguez Padilla, donde se recogen más de mil sentencias de los enlaces de los de la sierra, no localizamos una sola pena capital. Pero lo más sorprendente es que ni el mismo autor hace comentario alguno al respecto, por lo que se sigue haciendo pasar como hechos reales los fusilamientos generalizados. Está en nuestras manos conocer realmente lo sucedido o seguir viviendo el mito. 
         Y es que Cada vez más, se hace necesaria la ponderación objetivade los logros políticos o sociales de la República del 31. 
         1º) Se ha dicho y es así que el constitucionalismo español no tiene su origen sólo en este momento. Desde 1812, un amplio elenco de constituciones lo certifica.
         2º) El lastre anticlerical. Una de las principales causas del desastre fue sin duda el anticlericalismo. La clase dirigente dio claras muestras de cómo este sentimiento que traspasa lo racional se hizo centro de sus más hondas preocupaciones, soslayando los males endémicos que asfixiaban al país. Se persiguieron las raíces de la tradición, las costumbres y las creencias de la nación, mientras crecía el paro obrero y la desigualdad social; y se alentaban las revueltas callejeras de manera inconsciente, sin articular medidas eficaces para combatir el desempleo. El porqué de todo ello apenas ha sido abordado por los historiadores.
         3º) El ambiente cultural es cierto que floreció; pero al tiempo se mantuvo a amplios sectores de la clase obrera al límite de la subsistencia, en la misma indigencia, sin atisbarse durante el período republicano medidas eficaces que potenciaran mejora social alguna. Efectivamente, los intelectuales, dieron la talla; pero los políticos, no. La Edad de Plata de la cultura española es irrefutable a la vez que los responsables directos del mantenimiento y defensa de la justicia y del orden social vivían una quimera que nada tenía que ver con la frustrada realidad social, donde el hambre era frecuente y el país se desangraba.
         El esfuerzo de Federico y su Barraca es encomiable, pero desde luego, el teatro clásico de todos los tiempos sólo llegará a todos los rincones de España con el dictador y Estudio 1.
         4º) La causa de la mitificación la encontramos en el hecho mismo de la ausencia de crítica alguna a tantos errores del sistema por parte incluso de la intelectualidad del país en el momento, lo que nos parece inexplicable desde todos los puntos de vista, mostrando una ceguera absoluta, si no temor a la represión, con honrosas excepciones que plantearon suaves y sutiles críticas, que la generalidad ignoró. 
Lamentablemente la intelectualidad calló de manera incomprensible en la generalidad de los casos. Algunas excepciones como Unamuno o Jacinto Benavente son bastante significativas. Éste último, en un Discurso en Málaga, en mayo de 1935, decía:
Los más vulgares delitos comunes han ascendido a la categoría de delitos políticos. Se roba y se asesina en nombre de una idea. Con mostrarse afectos los criminales al régimen, han gozado de la condición de delincuentes políticos. En cambio, los delincuentes políticos no han sido tratados como criminales, con el beneplácito de los gobernantes... Es una farsa trágica la dictadura del proletariado. En el fondo esa dictadura es una dictadura burocrática de una pequeña parte del proletariado. Los directivos sólo procuran apoderarse del bombo de esta lotería de la revolución, y mejor aún, para no esperar los azares de la fortuna, antes del sorteo se alzan con el dinero de los premios.
         5º) En resumen: Prevaleció el ideal sobre la realidad social y humana. El porqué de tal obstinación sólo se puede encontrar en el pensamiento revolucionario, en la obsesión con el proceso y el miedo a la disidencia y represión existente desde 1931.
         Se atentó contra la misma estructura del edificio social, político y religioso de manera iluminada y, en contrapartida, nada. La labor desarrollada por las misiones pedagógicas, encomiable, pero, en lo que respecta a trabajo para las masas obreras, nada.
         La Edad de Plata de la cultura española enmascara, en el aspecto económico, la Edad de Piedra.
         La suma de ambas edades ofrece el oropel que caracteriza el período republicano. Los esfuerzos políticos por paliar la situación económica sólo se dirigieron a enervar la conflictividad social; ninguno, a la creación de puestos de trabajo que generasen bienestar a los desfavorecidos. Una conciencia revolucionaria más clara, imposible.

Biblioteca de Andalucía 
      
  Una de las causas del conflicto civil la centramos en la represión política contra el Estado, con un claro objetivo desestabilizador, encontrando especial responsabilidad en el anarquismo radical o extremista. El terrorismo contra el Estado, era inaugurado con el asesinato en 1870 del general Juan Prim y Prats, con el que se podía comprobar la facilidad de los magnicios. En realidad, la política española se había acostumbrado a estas ejecuciones sumarísimas de sus líderes y todo ello contribuirá a la desestabilización del país. Esta antorcha era tomada por los anarquistas:
     -En 1897 acababan con la vida de Cánovas del Castillo, a manos del italiano Michele Angiolillo.
    -En 1906, el atentado de otro anarquista, Mateo Morral, contra Alfonso XIII el día de su boda.
      -En 1910, atentado contra Maura.
      -En 1912, era asesinado el dialogante jefe del Partido Liberal José Canalejas, presidente del Consejo de Ministros, que apostaba por la democracia, a manos del también anarquista Manuel Pardinas Serrato.
         -En 1921 tenía lugar el asesinato de Eduardo Dato, a manos de los igualmente anarquistas Pedro Mateu Cusidó, Luis Nicolau Fort y Ramón Casanellas Lluch, que paradójicamente serán beneficiados por las amnistías políticas de la Segunda República (los anarquistas dispararon durante más de dos minutos, al grito de¡Viva la anarquía!).
         A la actividad anarquista se sumó la represión política.
     -En diciembre de 1935, era asesinado Alfredo Martínez y García-Argüelles, sobrino político de Leopoldo Alas Clarín, formado en las filas del Partido Reformista de Melquiades Álvarez con la monarquía, y representante del Partido Demócrata Liberal por Asturias con la República.
         - En 1936, nada más ganar las elecciones el Frente Popular se cerraban las sedes de Falange, partido que había nacido meses antes. En marzo, era detención de José Antonio, que sería fusilado meses más tarde.        
        -El siguiente magnicidio, será el detonante de la guerra civil, el asesinato de Calvo Sotelo, líder de la oposición política, tras el del teniente Castillo, al parecer por haber disparado contra un joven tradicionalista. 
      Periodo de confusiónConfusión entre República como sistema político y los gobiernos que controlaron la República, como la confusión entre los términos libertad, marxismo y democracia. Ya el profesor Rodríguez Adrados alertaba de ello al referirse a la 2ª Guerra Mundial cuando se encontraba el comunismo aliado de las democracias occidentales. 
         Parece claro que la Segunda República tratará de instaurar un Estado democrático al modo europeo, tomando como modelo la Constitución de la República de Waimar. Se conseguirá en teoría; la práctica quedará muy alejada del fin propuesto, al mezclarse con las influencias expansivas del comunismo, de la revolución proletaria y del anarquismo. 
          Es clara en este momento, la existencia en España de una tensa conflictividad social que por su flanco izquierdo apuntaba hacia la revolución y por el derecho a la defensa de los valores tradicionales salvaguardados en última instancia en la constitución de 1931, ignorada por la revolución y las colectividades al uso soviético.
          La sociedad, en su conjunto, no aceptaba los drásticos cambios que se imponían en la etapa reformista, salvo un sector del mundo obrero. De ahí, la inexactitud de considerar como un sistema democrático y de libertades el existente durante el período de la Segunda República Española, que aunque existió en un plano meramente teórico, no tardaron los acontecimientos en demostrar los verdaderos tentáculos de la revolución: la actividad anarquista y marxista, promovida desde Moscú por los Frentes Populares, que coreaban los vivas a Rusia. La sociedad permanecía atónita ante la cadena de despropósitos que se sucedían, sin que los responsables de su gobernabilidad los impidiesen.
         Los acontecimientos vividos hasta el 18 de julio de 1936 demostraron tanto la incapacidad de la clase política dirigente como la capacidad de resistencia de aquella amplia base social que sustentaba los valores tradicionales de la nación y aceptaba los constitucionales, como demostró desde 1931, pero a la que repugnaba la barbarie revolucionaria y los atentados contra ellos mismos.
       Frente a tan prolongada secuencia de provocaciones provenientes de los líderes políticos en sus proclamas y de las masas populares en sus realizaciones, se sucedía la entrada en escena de esta sociedad, la cual pareció fácil de moldear, ante la pasividad manifiesta en la secuencia continua de represión padecida desde 1931; que bien pudiera llamarse contrarrevolucionaria; contra esa revolución marxista, contraria a desmanes e incendios. En principio, opuesta sólo a los valores de la revolución marxista, sin que se vislumbrara aún la forma política definitiva que pudiese adoptar, ya que a diferencia de la izquierda, la derecha carecía de una sistematización política definida. Después, desembocaría en un régimen autoritario que, tras el golpe militar, se iría adaptando a distintas formas políticas, según lo exigiesen los tiempos y las imposiciones internacionales, pero que mantuvo siempre el denominador común anticomunista y de defensa de los valores de la sociedad española y europea tradicional, como el propio Unamuno manifestó y a la postre toda Europa se felicitará con la caída del muro de Berlín y la desaparición generalizada del comunismo.
          Los tintes revolucionarios que alcanzó la Segunda República se pueden reflejar en el asesinato no sólo de los considerados de derechas sino también otros como Andrés Nin, líder del POUM (Partido Obrero de Unificación Marxista), asesinado por los comunistas-estalinistas del PCE. En Alhama, el alcalde socialista Antonio del Pino. La revolución se cebaba en los mismos revolucionarios, como sucede en estos períodos de revoluciones políticas, que se convierten a veces en la apoteosis de los descalabros.
          El período revolucionario es innegable en la comarca desde el punto de vista gráfico con el repertorio documental que se aporta. Y desde esa posición la sublevación militar, apoyada por media España constituye el desarrollo lógico de los episodios históricos vividos y revolucionarios.
          El verano y el otoño de 1936 constituyen en la comarca las estaciones del terror, en cada una de las poblaciones distintas fechas en las que se sucederán los encarcelamientos sin causa y los fusilamientos sin juicio: 25 de julio, el 1 y el 6 de agosto y en general el otoño de 1936 fue el tiempo del terror.
          Legitimidad discutida. Estas tropelías y asesinatos cometidos por el denominado legítimo gobierno, son los que le restan precisamente la legitimidad. A no ser que todos los asesinatos y tropelías cometidas deban ser consideradas legales y justas.
          A todo ello sucederá la represión nacional. Los consejos de guerra extractados y porcentuados en el libro tienen lugar en el mismo período bélico y numerosísimos después de la finalización de la guerra. Cuando se pudo detener la maquinaria de la muerte, tampoco se hizo, prolongándose de esta forma la represión sin sentido.
                  
         CONCLUSIONES GENERALES. Presentamos seguidamente un somero hilván de conclusiones generales del período estudiado, cuya ampliación se puede seguir en los capítulos correspondientes, evitando de esta forma redundar en ideas matizadas con anterioridad: 
1) El último período de la Restauración y especialmente los años de la República se mantiene una profunda desigualdad social que abre una brecha insalvable en el país entre un grupo acomodado y la clase trabajadora, al límite en muchas ocasiones de la misma subsistencia. Ello dará lugar a una acentuada confrontación social que encontrará cauce en la violencia política, con la justificación de saqueos, incendios, atentados al patrimonio artístico nacional, el crimen y el asesinato, y alcanzará su mayor virulencia en la guerra civil.
2) La violencia política generalizada se manifiesta en la prensa nacional, de manera especial en la prensa política y en la oratoria partidista, respaldada por políticos de primera línea. Su plasmación en la realidad se concreta en los magnicidios del que es víctima el ala conservadora de la sociedad por parte de la dialéctica marxista y de la práctica anarquista durante el primer tercio del siglo XX: asesinato de Cánovas (1897), atentados contra Maura (en 1904 y 1910), asesinato de Canalejas (1912), asesinato de Dato (1921), el asesinato de Alfredo Martínez y García-Argüelles (1935) y, finalmente, el asesinato de Calvo Sotelo. Al final del período revolucionario emerge Falange, en 1934, cuyo líder no tardará en ser detenido de inmediato en marzo de 1936, tras la victoria del Frente Popular en febrero, y posteriormente asesinado.
3) Desde la proclamación de la República, se produce una intencionada y nociva identificación del sistema político republicano con el revolucionario de signo marxista, orientado por los dirigentes políticos de modo partidista, lo que terminará con el propio sistema. En el caso concreto de Alhama, resulta flagrante la denominación de algunas calles con el nombre de los propios dirigentes marxistas coetáneos, como la instalación en el consistorio de sus propios retratos.
4) Desde 1931 a 1936 se asiste a un proceso revolucionario larvado que se descubre abiertamente tras la victoria del Frente Popular en febrero, momento desde el cual la revolución es imparable. Esta revolución es abortada por la contrarrevolución, el alzamiento nacional y simbólicamente por el segundo golpe militar, el del coronel Casado.
5) Que durante el proceso revolucionario, en la comarca estudiada, alcanza alto grado de desarrollo la represión política, pudiéndose distinguir un período iconoclasta, otro de cruenta represión con encarcelamientos y fusilamientos de quienes se consideraban desafectos a la revolución y otro de desaparecidos.
6) Que la revolución alcanzó tal desarrollo, que como en otros conatos revolucionarios, acabará contabilizando víctimas entre los revolucionarios. Ello se materializa en Alhama en la ejecución del alcalde socialista Antonio del Pino a manos de anarquistas de la FAI malagueña por considerarlo elemento fascista.
7) Que poco se ha detenido la Historiografía en este proceso revolucionario y contrarrevolucionario, sin que encontremos razones para ello que lo justifiquen, ya que la revolución marxista es manifiesta tanto en el Viejo Continente como en el país y en la comarca, al hilo de los episodios desarrollados y de las instituciones creadas.
8) Que durante la Segunda República no se conocen mejoras económicas, laborales ni culturales en la comarca. Y sí por el contrario gran efervescencia revolucionaria con la generalización de actitudes violentas por parte de los grupos de izquierda fortalecidos por las arengas de la clase política rectora.
9) Que la represión política ejercida sobre la población civil por parte de las autoridades denominadas legítimas en 1936, teóricamente representantes del sistema político configurado en 1931, resta toda legitimidad a las mismas y fue pernicioso para el sistema republicano.
10) Que en la comarca de Alhama, como se dijo, se asiste durante el gobierno del Frente Popular a una furia iconoclasta de alto nivel, a la detención de personas sin causa legal alguna, a la ejecución arbitraria sin asistencia jurídica, a fusilamientos grupales y sumarísimos, con inclusión de menores de edad, grupos familiares… y con desaparecidos incluidos, lo que constituye sin duda crímenes de lesa humanidad. Al tiempo, una depuración ideológica dirigida desde el poder gubernamental.
11) Que la ocupación de la comarca de Alhama por los nacionales aborta, como en el resto de España, el proceso revolucionario decididamente abierto que desmarcaba a la República de la democracia y la posicionaba en la línea de las repúblicas marxistas, conllevando la desaparición de las instituciones correspondientes, como La Colectividad ObreraEl Socorro Rojo Internacional… Y, por ende, la propia liquidación del sistema político republicano-marxista.
12) Que la represión franquista, al igual que la marxista, comienza con los correspondientes decretos de depuración política; pero a diferencia de ésta mantiene unos procesos judiciales –inexistentes en aquélla-encuadrados en los consejos de guerra, contables, observables, cuantificables y criticables, cuya pena máxima fue la capital, reservada para los delitos de sangre demostrados. Abolida la cadena perpetua, la máxima pena fue la de 30 años de reclusión, seguida de la de prisión mayor y menor en distintos grados. No ingresaron en prisión quienes tuvieron una pena inferior a 12 años, y no sobrepasando los condenados en ningún caso la docena de años de reclusión, tras la continua revisión de las condenas. 
13) Después del establecimiento de las correspondientes gestoras municipales impuestas por los militares, el Ayuntamiento de Alhama respetó las disposiciones legales anteriores al 18 de julio, por considerarlas emanadas de un mismo cuerpo jurídico legal.Desde esa fecha, hasta el 23 de enero de 1937, no se respetó ningún acuerdo municipal por considerar un período revolucionario, dirigido por una potencia extranjera. 
14) Tras quedar extinguida la revolución en la comarca, se produjo el éxodo masivo de la población, descendiendo los efectivos totales aproximadamente un 50%, debido tanto a la huida de población foránea que se encontraba refugiada en la comarca a causa de la guerra, como a los bulos generados por los milicianos sobre la represión franquista que potenciaron el abandono. Por este motivo, se producirá en los meses sucesivos un regreso continuo de los que marcharon hasta la recuperación del pulso demográfico.

15) Dada la ruina general a causa de la guerra y el aislamiento internacional del país, los años de postguerra llevarán la pobreza y el hambre a un porcentaje elevado de la población, que se puede cifrar alrededor de l.000 familias en Alhama, las que tradicionalmente carecieron de trabajo durante todo el período de vigencia de la República. 
16) La recuperación económica y la dinámica social se producirán lentamente, a la par que resurgían las fiestas civiles y religiosas. Al mismo tiempo, se producía un desarrollo inusitado de la infraestructura comarcal, con la creación del Pantano de los Bermejales, Carretera de Játar, nuevas poblaciones, viviendas sociales, creación de centros escolares... Todo ello encuadrado en la ideología político-social del Movimiento Nacional. 

17) En la génesis de los años 40, tenía lugar el desarrollo de la actividad generada por la gente de la sierra. Los episodios documentados sembraron la comarca de miedo y temor en tanto duraron los atracos, secuestros y asesinatos, como su persecución, siendo la población quien padeció la acción represiva tanto de las partidas como de las contrapartidas. La generalidad de la investigación histórica hasta el momento omite a las víctimas de la guerrilla y la represión ejercida por las partidas en sus filas. Igualmente, es común justificar en la historiografía actual los actos de extorsión y asesinatos o considerarlos acciones heroicas. También se soslaya la responsabilidad histórica de los latrocinios perpetrados.




Presentación del libro  en Alhama
Por
Juan Miguel Larios Larios, profesor y doctor en Historia (jubilado)




El autor y el profesor Larios Larios. Biblioteca de Andalucía (Granada)

Excelentísimo Señor Alcalde, ilustrísimos señores concejales, amigos y familiares, señoras y señores: muy buenas tardes a todos.
Nos encontramos reunidos en este foro solemne y público del Salón de Plenos del Excelentísimo Ayuntamiento de Alhama de Granada, convocados por Don Salvador Raya Retamero, a fin de comunicarnos la siempre agradable noticia de un nuevo libro que acaba de salir a la luz pública. La gestación y posterior publicación de un libro, a menudo se compara con el previo embarazo y el posterior parto de una nueva criatura, por lo que tiene de laborioso en su elaboración y se novedoso en su salida a la luz pública. Y en nuestro caso el parto ha sido doble, ya que se presenta en dos abultados volúmenes. El símil se debe a la ardua y paciente tarea que conlleva la edición de una obra literaria, creación del espíritu en cuanto a su contenido y confección material en cuanto a su soporte. La publicación de un libro es causa de satisfacción tanto para el escritor como para el público lector. Lo es para su autor porque ve cumplido su objetivo, tras un dilatado esfuerzo, pero lo es también para su lector, quien puede satisfacer su ansia de conocimiento mediante el contenido del mismo.
 “Un hombre para ser completo ha de plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro” (José Martí). Y el comentario jocoso añade que luego al árbol hay que regarlo, al hijo alimentarlo y al libro hay que encontrarle quien lo lea. Los dos primeros hechos son relativamente normales y habituales, en cuanto a lo de escribir un libro…Cualquier persona no está dotada de las cualidades necesarias para lograrlo. Y además lo de la publicación, en los tiempos actuales está pero que muy difícil. Supongo que Salvador ha plantado más de un árbol, o en su Alhama natal o en la Churriana que lo acoge. Hijos, al menos ha tenido tres, de los que puede estar sumamente orgulloso. Y ¿libros?, en este caso su producción es muy abundante y variada.
Para mi resulta un serio compromiso y una enorme responsabilidad afrontar la presentación del autor y sobre todo de su obra. Solamente se me hará más llevadero si lo hago desde la amistad y la cercanía del asunto. De la amistad que me une a Salvador, conocido desde hace años y la cercanía del lugar y los hechos analizados, donde nacieron mis antepasados.
Salvador Raya es licenciado en Geografía e Historia, especialidad de Historia Moderna y América, doctor, igualmente en Historia, por la Universidad de Granada, con el estudio de “La formación de una ciudad castellana en el reino de Granada: Alhama (Siglos XV – XVII)…; miembro de un equipo de investigación universitario, profesor de enseñanza secundaria en un prestigioso centro, paciente y tenaz investigador y, en consecuencia, prolífico autor de libros, de los que, a menudo, se convierte en su editor.
Salvador es un historiador que se ha curtido desde su juventud en dicho campo a golpe de archivo y a fuerza de documentación. Es un historiador local, que en el ámbito de su ciudad natal ha llegado a ocupar el primer puesto por sus numerosas publicaciones, llenando la inmensa laguna que sufría la erudición local.
Veinticinco años de investigación, compaginada con su dedicación docente y sus responsabilidades de padre de familia, han dado como resultado más de una treintena de libros de temática histórica fundamentalmente. Viendo su elenco bibliográfico, nos percataremos de que la mayoría de sus títulos nos llevan a la historia local de su pueblo, la ciudad de Alhama. Su pueblo y el pueblo de sus mayores ha sido el principal objeto de sus pesquisas…
Al menos veinticuatro volúmenes nos ofrecen luz sobre diversos periodos y aspectos de la historia alhameña. Desde la prehistoria hasta nuestros días, desde la heráldica hasta la vida religiosa, pasando por la diplomática, las crónicas, los libros de viajes y el patrimonio artístico.
Según su autor, este nuevo libro cierra el ciclo dedicado a su patria chica. Pero no creo que cumpla dicho propósito. El gusanillo que lleva dentro no se lo permitirá. Al menos así lo creemos y así lo esperamos.
La historia de la 2ª República, la guerra civil y el franquismo es el asunto del último libro de esta saga, al tiempo que lo es cronológica y temáticamente y, como él mismo dice, el libro analiza los años más negros de la Historia de España.
Una guerra civil no es un acontecimiento memorable, pero no por ello deja de ser objeto de estudio atento y crítico. Memorable, porque no es algo de lo que estemos orgullosos y debamos celebrar. Sin embargo, su consideración nos lleva al análisis del pasado para investigar sobre sus causas, a fin de afrontar el futuro con nuevas expectativas. Todos estamos de acuerdo en considerar que un enfrentamiento bélico entre hermanos es la empresa más inútil y demoledora.
El autor intenta ser objetivo, a pesar de las dificultades que conlleva el asunto. Sin embargo no se limita a la simple narración de los hechos acaecidos, sino que trata de poner de relieve las contradicciones en que, a menudo, cayeron los protagonistas de algunos de los acontecimientos. Igualmente refuta los erróneos planteamiento que ha veces ha hecho la historiografía del momento.
El asunto central de la obra no es otro que el desarrollo de la guerra civil en la comarca de Alhama. Pero para comprenderla mejor en su contexto, el marco cronológico se amplía, abarcando los periodos de la 2ª República y la primera etapa del franquismo, a fin de contemplar y valorar las causas y consecuencias de la misma.
La narración de los hechos a nivel de España se funda en una serie de historiadores a los que acude con frecuencia para justificar sus aseveraciones. En cambio la historia más próxima, la que nos lleva hasta Alhama y su territorio, está tejida a base de la documentación local, como son las Actas Capitulares del Ayuntamiento, la documentación del Archivo Histórico Nacional, los testimonios de afectados y familiares, así como la documentación descalificada por la ley de la Memoria Histórica.
Las declaraciones comprenden la testificación de allegados de algunos de los asesinados, entre los que destacan los de diecinueve personas que lo hicieron en los años inmediatamente posteriores.
A nivel institucional, son destacables los testimonios redactados por las religiosas clarisas del Convento de San Diego, así como por el primer párroco, tras la contienda, quienes destacan la pérdida del patrimonio artístico y religioso.
De todo el acerbo de hechos relatados, destacaremos dos aspectos, por encontrarlos más cercanos a nosotros e ilustrativos de los sucesos narrados. Estos son: los testimonios vertidos por seres anónimos que, ¡ojo!, no han temido dar su nombre y poner su rostro a la hora de ofrecer su relato, tanto en el pasado como en la actualidad. Y el otro es el que nos remite a la destrucción del patrimonio artístico-religioso por parte de un grupo de desalmados. Atentados contra vidas humanas y atentados contra objetos de un valor incalculable. Nada de ello tiene ya remedio, pero no por ello hemos de dejarlos sepultados en el olvido.
Testimonios sobre los asesinados: Se recogen los testimonios de veintidós familiares de los asesinados, los cuales lo hacen bajo juramento en 1942, con motivo de los consejos de guerra contra los encausados.
Dichos testimonios consisten en las respuestas a un cuestionario, igual para todos, por lo que su contenido es muy similar. Comienzan manifestando el tipo de parentesco con la persona asesinada. En casi todos los casos se trata de testimonios femeninos, lo que resulta normal, al ser las viudas e hijas de los desaparecidos. Que las primeras detenciones, las del día 2, fueron llevadas a cabo por miembros de la Guardia Civil de Alhama, en cambio las del día 27 por personas extrañas, forasteros venidos de fuera. Que fueron llevadas a la cárcel y sin juicio ni nada, asesinadas de manera sádica y violenta. No pueden describir las heridas, pues no les fue permitido ver sus cadáveres. Identifican. Dan cuenta de los asesinos, mediante sus apodos de la más baja estofa o de sus nombres y dos apellidos. También dan cuenta de cúal fue su posterior paradero.
Declaraciones testificales sobre algunos asesinatos:
 - Don Eduardo Raya Mijoler (pág. 267). Con 15 años fue detenido cuando se dirigía al pueblo a por pan y otros alimentos, montado en una cabalgadura. Fue llevado al Comité, sometido a un prolijo interrogatorio y luego a la cárcel. Allí estuvo junto al sacerdote Don José Becerra, pudiendo comprobar la gran bondad y el coraje de aquel venerable anciano. Al ser llamado el joven por su nombre y dos apellidos, el sacerdote exclamó: “No, no os llevéis a ese muchacho, que es muy joven todavía, llevadme a mí que ya soy un viejo”. Esto dijo pensando que se lo llevaban para fusilarlo. Eduardo murió en Alhama, a los 87 año, el 9 de Mayo de 2009. Su padre, Don Juan Raya Serrano, fue asesinado por el gobierno del Frente Popular en Málaga, tras ser votada su muerte en asamblea en el Cinema Pérez, por los miembros del Comité revolucionario. Cuando esto ocurría, ya era huérfano de madre desde su infancia. (pág. 267).
 - Testimonio de Don Juan Gómez Parejo: Tras declarar ante el Juez de Alhama el día 21 de Julio de 1942 todos los asesinatos que recuerda cometidos por las autoridades marxistas, da cuenta, igualmente de los asesinos: “Mala Suerte, Perute el Municipal, José María el Albañil Canales, (27 de Julio), Alfonso Pérez Molina apodado Ratón, José Pérez Calvo apodado Ratón, un hijo de Perico Pereo, un Pica Viruela conocido por el Abuelo, el conocido por Canales, un hijo de Correviejas (1 de Agosto) y otros que no recuerda” (pág. 322)
 - Testimonio de Don Fernando Aranda Franco: Su declaración tuvo lugar el 28 de Julio de 1942. Lo hace en términos similares al anterior, aunque aportando más datos y más lujo de detalles. Lo que deja bien claro es que los milicianos procedían de Málaga, que el producto de los saqueos y robos era enviado a Málaga y que algunos alhameños fueron igualmente asesinados en Málaga. (págs. 324-326)
 - Dª Virginia Muñoz Calvo: Señala como asesinos de su hermano a Mala Suerte y Bernardo Castillo Rodríguez, apodado Canales. Que en el camión iba el guardia civil José Hernández Rivas y que no quiso decir los nombres de los asesinos y que si habían matado a su hermano, José Muñoz Calvo, tendrían algún motivo para ello. El motivo fue ser presidente de la juventud de Acción Católica. (págs. 341-342)
 - Dª Rosario Melguizo Santander: Que su padre, Don Manuel Melguizo Martínez fue detenido por una pareja de la Guardia Civil en su domicilio de la calle Salmerones. (pág. 343)
 - Dª Manuela Velasco Negro: Declara como personas sospechosas del asesinato de su marido, Don Adelardo Pérez Castillo, a Alfonso Pérez Molina, Ratón, Enrique Casero Arenas, Casero menorCatite, hijo de Perico Pereo. (pág. 344)
 - Dª Pilar Cortés Castillo: Su esposo, Gabriel Romero Velilla, fue detenido en su domicilio de la calle de Enciso por, entre otros, Ramón Jaime Conde, Ricardo Calvo, Manuel Alférez Camacho, Antonio Pérez Lupiañez. (pág. 345)
 - Dª Rosa Velasco Rodríguez: Que su tío, Don Salvador Rodríguez de León Branchant fue asesinado en la casa del maestro albañil llamado Rute, al ser delatado por Angustias, apodada la Naranja y que la delatora estaba en libertad. (pág. 345)
 - Dª Ana Melguizo Santander: Que su esposo, Don Luis Morales Palazón, fue asesinado en la calle Llana y que el último que le disparó fue un guardia civil llamado José Sánchez Benítez. (pág. 346)
 - Dª Ana Morales Palazón: Declara sobre el asesinato de su tío Don Francisco Morales Valenzuela, sacerdote de 55 años. Fue detenido por unos desconocidos, que no eran de Alhama, el día 27 de Julio de 1936. Fue conducido primero a la plaza del Mercado, donde intentaron asesinarlo, desistiendo de ello y llevándolo a la cárcel. Fue asesinado el 1 de Agosto, en la calle Baja de la Iglesia, al abrir las puertas de la cárcel. Persona sospechosa fue Tito Remendao, quien le disparó. Que su cadáver fue arrojado por el pretil de la iglesia a la calle del Señor del Portal (Baja de la Iglesia) por el vecino Diego el Zapatero, hijo de Encarnación la de los Perros. Tito Remendao fue a la prisión de Granada y Diego siguió en libertad por Alhama. (pág. 346).
 - Don Enrique Martel Velasco: Hermano de Don Luis Martel Velasco, quien fue detenido por una patrulla de milicianos en su propio domicilio. (pág. 347)
 - Dª Ana Ruiz Ramos: Que su hermano, Don Antonio Ruiz Ramos, fue detenido por un grupo numerosísimo y solo conoció a uno que dijo “Yo soy Minutos”. Que vio su cadáver en un carro tapado con una sábana, conociéndolo por el pantalón. Que de los autores del crimen sólo conocía a uno apodado Ciruela, quien pasó cerca de su domicilio diciendo: “Ya han caído todos los sinvergüenzas” y traía las alpargatas llenas de sangre. (pág. 347)
 - Dª Enriqueta Alba Ramos: Su hermano, Don Ricardo Alba Ramos, era estudiante, sin filiación política, de diecisiete años de edad y fue asesinado en la calle Llana. (pág. 348)
 - Dª María Espejo Rodríguez: Viuda y madre de José Velasco Díaz, estudiante, quien fue asesinado con diecinueve años de edad. Fue detenido por varios milicianos venidos de Vélez Málaga, entre los cuales iba su vecino el Hijo de Caracol. (pág. 348)
 - Dª Rosa Negro López: Tía del joven Arsenio Negro Ortiz, de 19 años de edad y afiliado a Falange. Que durante el tiempo que estuvo detenido, el vecindario, compuesto de mujeres, hombres y niños indeseables daba gritos de insultos contra los presos. Que por referencias sabe que participaron en el crimen: Juan Martín Morales, apodado Pilla Liebres, Carlos López Castillo, apodado Guita, José Peláez Navarrete, apodado Zurrana; Antonio Navarrete, apodado Pío Pío; Juan Castillo Ramos, apodado El Frito; Vicente Frías Villarraso, apodado El Capitán; José Martín Camacho, apodado el de Beatriz; Enrique Casero Arenas, apodado Casero el Menor; Villarraso Ordóñez, apodado el Minutos. (pág. 349)
 - Dª Juana Pérez Castillo: Esposa de Don José Viciana, quien fue detenido por la guardia civil y varios vecinos, a los que no reconoció por vivir en un segundo piso y no asomarse al balcón por el miedo que reinaba en la ciudad, y, posteriormente, asesinado en la sacristía de la iglesia. (pág. 350)
 - Dª Ana Morales Palazón: Declara sobre el asesinato de su esposo Don Eduardo Morales Larios. Fue detenido en su domicilio el 21 de Julio de 1936 por una pareja de la Guardia Civil en su propio domicilio, conducido al cuartel y luego a la cárcel. Que él mismo le dijo al teniente de la Guardia Civil Don Ángel Mari Díaz que su detención supondría su muerte, quien le contestó que no pasaría nada. Fue asesinado el 1 de Agosto, tras la apertura de la prisión. Personas sospechosas de participación en el crimen un tal Pica Viruela, que trabajaba con los Santanas. Fue condenado a muerte y llevada a efecto la sentencia. (pág. 350)
 - Dª María Espejo Rodríguez: Que su esposo, Don José Reyes Velasco Negro, fue asesinado en la sacristía de la Parroquia de Alhama el día 1 de Agosto. Personas sospechosas de participación, los de siempre. (pág. 351)
 - Dª Consuelo Ruiz Lozano: Que su marido era Don Antonio del Pino Molina, afiliado al Partido Socialista, fue detenido en el Ayuntamiento, donde estaba haciendo las veces de Alcalde, por el jefe de la Columna que se dirigía a Granada (pág. 352)
 - Don Francisco Gómez Álvarez-Campaña: Que su hijo, Jesús Gómez Díaz, afiliado a Acción Católica, de 17 años de edad, fue asesinado y encontrado su cadáver al final de la Carrera. (pág. 353)
 - Dª Encarnación Ruiz Porras: Perdió a su esposo y a un hijo sacerdote, de 72 y 33 años respectivamente. Confunde algunos datos en su declaración, posiblemente por su avanzada edad, 78 años. Los asesinos fuero marxistas de Málaga por orden de Don Arsenio Ramos Acosta (pág. 354)
 Así mismo, se añaden, en el apéndice documental, dieciocho relatos vertidos en la actualidad por personas cercanas a los hechos, que hablan desde el recuerdo de lo que vivieron y oyeron:
 - Isabel García (págs. 865-868)
 - Francisco Morales Morales (págs. 869-870), hijo de Don Eduardo Morales Larios y sobrino-nieto de Don Francisco Morales Valenzuela, ambos asesinados. Juez en diversas poblaciones, magistrado de la Audiencia de Granada y magistrado del Tribunal Supremo en Madrid.
Su testimonio es altamente conmovedor por la entereza de ánimo con el que se expresa y por no emitir juicio despectivo alguno, lo que dice mucho de su gran categoría humana.
Ha calificado de niñez dolorida la suya, tras la pérdida de su padre de aquella forma vil y violenta. Tenía solamente ocho años la noche del 22 de Julio en que sonaron en la puerta de su casa los aldabonazos de la muerte. El calor de la noche veraniega hacía que los balcones permaneciesen abiertos, por lo que aquel sonido seco despertó a todos los habitantes de la casa de Alta de Mesones. Era la Guardia Civil quien venía a por Don Eduardo…
A los tres días, el 25, festividad de Santiago, cuando se dirigía a la cárcel para llevarle la comida a su padre, presenció la profanación de imágenes y ornamentos sagrados a las puertas de la iglesia conventual del Carmen. Fuerte fue el impacto que recibió ante aquel vil espectáculo, que nunca olvidaría en su vida.
Los desagradables sucesos seguían sucediéndose en el ámbito del hogar familiar. Una tarde de los últimos días de Julio, no recuerda que era el día 27, mientras jugaba a la pelota con su hermano Eduardo, llegaron unos milicianos con escopetas para prender a su tío sacerdote. Una vecina los recogió en su casa para protegerlos y no fueran testigos de tal violencia, luego supieron que su tío también había sido detenido.
Por unas vecinas que se lo contaban a su madre supo del asesinato de dos sacerdotes en el puente de la Lancha, camino de Loja. De la muerte de su padre no supo hasta varios días después del suceso, acaecida junto con la de su tío sacerdote y otro tío, hermano de su madre...



En el Ayuntamiento de Alhama

Parece que los rojos la habían tomado con ellos, pues en otra visita despojaron a su madre de todas sus joyas. Y por si fuera poco con lo que llevaban sufrido, por el otoño de aquel año fueron arrojados de su casa, pera instalarse en ella los milicianos, con el batallón Granada. Su madre, Dª Ana Morales Palazón, mujer fuerte y que no se arredraba ante la adversidad, visitó al jefe del comité para suplicarle que impidiese el desahucio, cosa que no consiguió.
Pero las desgracias no habían terminado. Liberada ya Alhama, una bomba le siega la vida a su prima Inocencia Raya Morales.
El niño Francisco no era ajeno a lo que pasaba en torno suyo. Fue testigo mudo de lo que sucedió en su entorno, guardando todo en su memoria, para narrárnoslo setenta y cinco años después.
Y tras la narración de estos sucesos, se limita a calificar de amargos los días de la dominación republicana en Alhama y a elevar al Altísimo una plegaria por sus seres queridos para que los tenga en su santa gloria...
- Mª Teresa Raya Guerrero (págs. 871-876): “También recuerdo a mi abuelo, Papa Lucas, muy anciano, debía de tener más de 80 años, llorando desconsolado, como un niño, ante el cadáver de su hijo”.
 - Eduardo Raya Serrano (págs. 877-878)
 - Antonio Hernando Jiménez (págs. 878-879)
 - Cándido Luna Arcos (págs..879-880)
 - Bernardo Murillo Herrera (pág. 880)
 - Amparo Retamero Moles (págs. 881-884): “Játar era entonces un pueblo desolado: La iglesia fue saqueada. Los bancos, libros imágenes…, todo había sido quemado en la plaza”.
 - Ana García Arrabal (págs. 885-886): “Fueron numerosas las veces las que nos visitaron aquellos hombres que llenaban de terror nuestra vida, pues las amenazas a nuestras propias vidas eran habituales”.
 - Mª Luisa Retamero Moles (págs. 887-888).
 - Francisco Moldero Espejo y Teresa Espejo Molina (págs. 889-891).
 - Antonio López Ruiz (págs. 893-894).
 - Felipe García Cabello (págs. 895-897): “Unos se fueron a la sierra por miedo, otros por no ir a la mili, para sobrevivir, para ayudar a su familia…Pero el motivo político de oposición a Franco, eso no era verdad”.
 - Rafael Ortigosa Camacho (pág. 909-917): “Años después personas que en aquella época eran ya mayores y muchas de ellas republicanas, contaban que no habían conocido en nuestro pueblo un periodo de indigencia y necesidad como el citado periodo”. Rafael Ortigosa Camacho: “Otra memoria histórica…” en Alhama.
 - Francisco Fernández García (pág. 919-922): “Al día siguiente, 18 de Julio, los del pueblo nos llamábamos “rojos”.
 - Juan Miguel Larios Larios (pág. 929-933)
 - Francisco Castillo Zamora (pág. 935-938)
 - Juan Negro Castro (pág. 941-948).
Emilio Fernández Castro: “Los pseudo militares malagueños se presentaron en el Comité Local de Alhama, en donde reprocharon a los dirigentes políticos del centro, diciéndoles: “¿Es que no hay ningún fascista en este pueblo? Parece que es así, porque hemos podido comprobar que la cárcel de una población tan grande como lo es esta, se encuentra vacía, casi por completo”. (Hoces Pérez R. op. Cit. Pp. 227-228)
Nota manuscrita de D. José Viciana. (pág. 293): “Juanita: Ya que tú no tienes suficiente valor para venir a verme, mándame a los niños para darles un beso. Pepe”.
Asesinato de Don Antonio Velasco Velasco: Fue localizado oculto en casa de un familiar, el médico Don Miguel Ramos, denunciado por una empleada. Lo llevaron a declarar a Ventas de Zafarraya, el día 19 de Septiembre de 1936, y cuando regresaban para Alhama, al pasar frente a la finca que labraba, lo asesinaron sin mediar palabra. Su hijo Don Cristóbal Velasco prefiere no nombrar a uno de sus asesinos, “pues hay que olvidar”, según su propia confesión. (pág. 314)
Simulacro de ejecución familiar (pág. 317)
Asesinato del médico Don Juan Negro Hinojosa: Alhameño y casado con una alhameña, Dª Pilar Castro Molina, ejerció la medicina durante once años en el pueblo de Escúzar. El 24 de Julio fue asesinado por cuatro milicianos de Escúzar. Cuando fueron a buscarlo, se encontraba visitando enfermos, y cuando lo localizaron le dijeron que su casa estaba ardiendo. Con esta mentira le hicieron regresar y por el camino fue asesinado y su cadáver maltratado. El caballo regresó solo y con las pezuñas golpeó las puertas, como si él mismo también fuese víctima de la represión (testimonio de Dª Pilar Negro Castro) (pág. 320)
Perfiles de algunas víctimas (pág. 332)
Relación de personas asesinadas
Personas sospechosas
 Destrucción del patrimonio artístico-religioso de Alhama.
El estudio pormenorizado y razonado de la destrucción y desaparición del patrimonio artístico-religioso de Alhama es una tarea que está aún por hacer. Es cierto que en el presente libro se aborda el mismo, pero a base de una serie de pinceladas y testimonios, que no dejan de ser elocuentes y significativos, aunque faltos de un análisis completo y sistemático.
Carecemos de los inventarios que podrían ofrecernos luz, ya que fueron destruidos, al igual que los objetos inventariados. Al ser destruidos los archivos eclesiásticos se nos privó, con ello, de los documentos e inventarios que podrían ilustrarnos sobre el mismo. Pero es suficientemente elocuente el vacío que ha dejado…
Alhama, un pueblo con tanta y tan rica historia ha quedado desolado…para siempre. Ha quedado una cicatriz imposible de restañar…De contar con un patrimonio rico y eminente, ha quedado como la pobre viuda que vive en el más triste desamparo.
Los escasos residuos que han quedado: una serie de ricos ornamentos y unas cuantas piezas de orfebrería son un elocuente exponente de lo que existió.
Lo que si existen son una notas manuscritas realizadas por Don Manuel Gómez-Moreno González, a finales del siglo XIX, posteriores al terremoto de 1884. En absoluto se trata de una relación completa. Son solamente unos apuntes, posiblemente para una posterior publicación, pero que se quedaron en el cuaderno y nunca vieron la luz. Son escrupulosas y vienen acompañadas de dibujos minuciosos, a tenor de su método de trabajo.
De lo que quedó tras la furia iconoclasta, da cuenta el “Informe sobre las pérdidas y daños sufridos por el tesoro artístico de Granada…”, elaborado por un equipo de prestigiosos profesionales, dirigido por Don Antonio Gallego y Burín, publicado en 1937. Por este “informe” conocemos el aspecto desolador que ofrecían los monumentos religiosos de Alhama, tras el paso de la furia devastadora del comunismo.
Dichas destrucciones comenzaron el día 20 de Julio de 1936, teniendo lugar la quema de: libros, ornamentos, imágenes y otros objetos religiosos de la iglesia del Carmen, según el testimonio del monaguillo, Antonio Castillo Molina, quien contempló horrorizado aquellos desmanes. Pero fue el día 25 de Julio, festividad del patrón de España Santiago Apóstol, cuando tuvo lugar el saqueo y quema de todas las iglesias y ermitas de Alhama.
La sesión capitular extraordinaria de ese día se limitó a informar de “graves circunstancias”, sin detallar nada.
Tras aquel brutal ultraje y desacralización La iglesia de la Encarnación se destinó a habitación de personas y animales. Las campanas fueron llevadas a Málaga para la fundición y fabricación de metralla. La iglesia del Carmen, destinada a Casa del Pueblo. El convento de San Diego saqueado y arrasado en su totalidad, donde aún permanecen las huellas de los hechos sacrílegos. La ermita de los Remedios: convertida en almacén y vivienda. Su antecamarín convertido en cocina. Arrancados los retablos y altares y derribada la cruz de piedra que se erguía ante la portada. La iglesia de las Angustias: se destruyeron los retablos, la mesa de altar y se perdieron las imágenes. La ermita de la Virgen de la Peña: saqueada, se clausuró para siempre. La ermita de los Ángeles: saqueada, su imagen lanzada al río.
Precedentes: Mayo de 1932: se derriba una cruz del paseo público.
 1933: se depura y cesa fulminantemente al maestro don Eduardo Morales Larios, por tener un Crucifijo en su escuela. Fusilado el 25 de Julio de 1936.
Para el conocimiento del patrimonio perdido, contamos con una serie de informes y testimonios que son recogidos en la obra del profesor Raya. No fueron elaborados con un carácter científico, pero si constituyen un elocuente documento de lo desaparecido.
 “Breve manifestación de lo ocurrido en esta comunidad y convento el año 1936 al levantamiento rojo” (Archivo del convento). Páginas 276-277).
 “Listado de los ornamentos y vasos sagrados y demás cosas de culto robadas por los marxistas al convento de Alhama en el año de 1936”.
 “Sacrilegios marxistas en Alhama de Granada” (IDEAL, 31 de Enero de 1937).
 “Informe sobre las pérdidas y daños sufridos por el tesoro artístico de Granada…”.
 “Informes parroquiales sobre lo sucedido durante la República en la comarca de Alhama”. Archivo General de la Curia.
 “Informe de Don Leonardo Navas Romero, primer párroco de Alhama tras…” (Archivo parroquial de Alhama)
 Manuel Gómez-Moreno González: “Descripción de los Principales monumentos de Alhama”, IGM, legajo CVIII (manuscrito)
 - En 1541 dieron a Pedro de Machuca, pintor, 200 ducados en cuenta del retablo que hace para la iglesia de Alhama.
 - En 1537 Miguel Sánchez pintó el cirio pascual de Alhama, obligándose a hacerlo como el de Loja.
 - En la capilla mayor: tabernáculo moderno. Antes había un retablo grande.
 - Dos altares a los pies del presbiterio. Lado del Evangelio: Crucifijo de tamaño natural y un cuadrito arriba del S. XV.
 - Inmediato al anterior (lado norte), otro altar con un cuadro de la Santísima Trinidad, copia libre del de Alonso Cano que hay en el Sacromonte.
 - Los demás retablos son churriguerescos.
 - Pies de la iglesia: Cuadro con la Virgen y el Niño poniendo una corona a Santa Bera (copia de Risueño, Catedral), dos capillas: una con la pila bautismal y la otra con la escalera que conduce al coro.
 - Lado de la Epístola: cuatro capillas
 La 4ª, dedicada a San Francisco (escultura del S. XVI) y cuadro con la impresión de las llagas del mismo santo.
 - Sacristía: cuadro de Crucificado de Alonso Cano. Está firmado por detrás.
 - Cuadro de la Virgen imponiendo la casulla a San Ildefonso, parece de Raxis.
 - Capilla de los Vinuesa (penúltima lado de la epístola). Tres cuerpos y un basamento. Primer cuerpo: San Francisco, San Juan Bautista y San Pedro – La Virgen amamantando al Niño – Adoración de los Reyes. Segundo cuerpo: Nacimiento de Jesús – Piedad al pie de la cruz – Sagrada Familia. Tercer cuerpo: Calvario – Arcángel San Gabriel – María.
- Personas sospechosas que participaron en el saqueo de la iglesia de Ventas de Zafarraya (pág. 365).
Los autores de todos estos desmanes y latrocinios tienen nombre y apellidos. Fueron procesados y juzgados, recibiendo sus respectivas penas y en casi todos los casos, revisadas, conmutadas o sobreseías.
- Se requisó a un dirigente socialista: una corona de la Virgen, un manto de valor, un pectoral, cálices, candelabros, dos custodias, etc. (pág. 403).







Otro momento del acto de la presentación del libro

- Relación de personas juzgadas en los consejos de guerra de haber participado en la destrucción del patrimonio artístico-religioso en Alhama (pág. 467):
 - T. Benítez A.: Participó como chófer en incautaciones y requisas. 12 años y un día, 6 años y un día (14-IV-1944).
 - M. Caballero F.: Participó en saqueos y registros. 12 años y un día (25-I-1940), sobreseimiento (10-X-1945).
 - M. Cabezas M.: Participó en robos y saqueos. 12 años y un día (29-IX-1942), (6 años y un día (26-IX-1942).
 - R. Calvo A.: quema de imágenes. Requisas. Detención de personas. 15 años de reclusión personal (9-VII-1943).
 - L. Camacho S.: Intervino en desmanes, robos, saqueos, incendios y detenciones. Reclusión perpetua, 30 años.
 - R. Casero Arenas: intervino en el saqueo e incendio de San Diego e iglesia del Carmen. Pena de muerte, 3 años de reclusión.
 - F. Castillo J.: participó activamente en el asalto de la iglesia, con destrucción de imágenes. Mientras el gentío robaba, se dirigió a él haciendo alusión a la Virgen de las Angustias con frases repugnantes y dijo: “todo os lo lleváis menos esta puta”. Arrojó la imagen por el Adarve del tajo. Reclusión perpetua, 30 años.
 - M. Fernández A. (mujer): intervino en el saqueo del convento de San Diego. 12 años y un día.
 - M. Fernández A.: intervino en el asalto del convento de San Diego. 12 años y un día. 6 años.
 - V. Frías V.: intervención en desmanes, robos, saqueos, incendios y detenciones. 30 años de reclusión.
 - C. García P.: participó en saqueos, incendios y detenciones, especialmente en San Diego, donde profanó las tumbas y colgó los cadáveres de las monjas de unos árboles. 30 años de cárcel (25-V-1944), sobreseimiento (20-I-1947).
 - T. Gómez A.: principal cabecilla de la horda roja.
 - Juan Martín Morales.: Saqueó el convento de Santa Clara y llevó objetos a su domicilio. 12 años y un día de reclusión temporal. Sobreseimiento (10-IV-1945).
 - C. Millán A.: se llevó a su casa una ventana del convento de Santa Clara.
 - M.J. Molina M. asaltó domicilios, el convento de San Diego y participó en su profanación. Participó activamente en todos los desmanes de Alhama. Pena de muerte. Pasado por las armas (27-X-1939). Sobreseimiento (15-II-1942).
 - M. Montilla J: cuando se asaltó el convento de clarisas, él estaba a la puerta con una escopeta. 12 años y un día de reclusión temporal (20-XII-1943).
 - R. Navas A.: bajo su mandato se ejecutó la quema de iglesias e imágenes. Pena (28-X-1939) Prisión provincial de Granada.
 - Alfonso Pérez Molina.: participó en saqueos de casas, en la destrucción San Diego, etc. Pena de muerte. 15 años de reclusión menor.
 - T. Ramos J.: destacó en el incendio de la iglesia de San Diego. 30 años de reclusión temporal.
 - G. Retamero R.: prestó servicio con los rojos en todos los desmanes. 30 años de reclusión. 20 años y un día de reclusión mayor (8-V-1944).
 - B. Robles J.: participa en registros, saqueos, detenciones y quema de imágenes. 30 años de reclusión militar perpetua (26-VI-1944). Sobreseimiento (20-III-1947).
 - B. Rodríguez J.: participó en desmanes, incendios, saqueos y detenciones. Especialmente en el convento de San Diego, profanando las tumbas de las monjas y colgando los cadáveres en los árboles. 30 años de reclusión mayor (4-VII-1944).
 - R. Ruiz M.: intervino en robos, saqueos y detenciones. 22 años y un día (20-VI-1941) Sobreseimiento provisional (10-X-1945) y definitivo (20-I-1947).
 - G. Triviño J. (mujer): actuó activamente en el saqueo de la iglesia parroquial. Reclusión perpetua (22-VII-1938), 12 años y un día de reclusión menor (28-VI-1943).
 - P. Vega J.: participó en saqueos y destrucción de imágenes. 12 años y un día (11-VIII-1942), 6 meses y un día (11-VIII-1942).
 - R. Velasco M.: participó en registros y saqueos. Pena de muerte. Fue ejecutado el 27-III-1940. Sobreseído el 30-VI-1945. Comunicado al interesado mediante anuncio en el tablón del juzgado el 18-III-1947.
IGLESIAS:
Iglesia Parroquial o Mayor de la Encarnación:
 “Informe…”: El edificio se salvó por ser de cantería y haber sido utilizado como refugio de personas animales. Los “marxistas” lo han despojado de: altares, retablos, órgano obra de Martín Fernández, 1541, robado y quemado), baranda del coro (obra de Francisco de Salcedo, cajoneras de la sacristía, de nogal con dieciocho cajones cada una, escalera y tornavoz del púlpito, los dos canceles, casi todo el mobiliario, la obra de cemento de la capilla mayor.
Se salvó un retablo de mármol rojo.
Se perdió el tabernáculo y los dos retablos laterales (eran del siglo XVIII).
Destrozadas todas las imágenes.
Sólo se salvó: Cabeza de Inmaculada, con un ojo saltado. Rostro de San Rafael. Rostro de una Dolorosa. Niño Jesús (lo vistieron con uniforme de juventudes comunistas). Se perdieron todas las pinturas, menos las situadas a gran altura: Crucificado de Alonso Cano. Descendimiento del estilo de Van Dick. (Se asemeja el Cristo a uno existente en Santo Domingo, obra de Felipe Gómez de Valencia). San Francisco. Virgen con el Niño Jesús. Un santo. Ornamentos y algo de orfebrería.
Desapareció todo el Archivo Parroquial y los libros de coro de pergamino, libros de inventarios y documentos. Sólo se salvaron algunos libros de bautismos.
Se perdieron: Trece imágenes de talla, grandes (de ellas, seis de gran valor)
 Dieciséis imágenes de talla, medianas.
 Sagrario de plata: robado y llevado a Málaga.
 Custodia de plata sobredorada, de más de medio metro de altura, de una arroba de peso, donada por los Reyes Católicos.
 Nueve cuadros atribuidos a Bocanegra.
 Nueve cuadros de menor valor.
 Ocho retablos antiguos de madera.
 Ornamentos: Ocho ternos, veintinueve casullas, ocho capas, cortinas de damasco, palio, estandarte, albas, roquetes, manteles, cajoneras. Cinco cálices, dos copones, tres custodias, cinco vinajeras, un incensario, tres hostiarios, una palmatoria, una cruz antiquísima, una lámpara, cuatro coronas grandes, tres coronas pequeñas, siete diademas, unos rayos, dos juegos de ciriales, diez lámparas, cien candeleros de metal, dieciocho cornucopias, .
 Todas las campanas arrojadas desde lo alto del campanario, menos dos,
Iglesia del Carmen:
Su interior fue totalmente arrasado, las losas sepulcrales de todas las capillas levantadas y los enterramientos violados. El gobierno rojo instaló en ella la Casa del Pueblo.
Todos los retablos fueron destruidos, salvándose, en parte, los labrados en yeso.
 El retablo mayor fue comprado a la Cofradía del Rosario de Granada, por lo que se deduce que era similar al actual de Santo Domingo, con el que hacía pareja, frontero (siglo XVII).
 El coro solo ha conservado la baranda de madera labrada, de principios del XVII.
 De pintura, solo ha quedado en su sitio, un retrato de una santa del siglo XVII, la puertecita de acceso al camarín con pinturas. De ornamentos, solamente se han podido recoger algunos ternos y el manto de Ntro. Padre Jesús.
 La verja que rodeaba el hastial de la iglesia fue derribada, así como la cruz que había junto a la puerta y otra que, en la misma calle, se levantaba a pocos pasos de la iglesia.
Se perdieron irremediablemente, ya que fueron arrojadas al tajo y luego quemadas:
 Diecisiete imágenes de talla.
 La imagen de la Virgen del Carmen.
 La imagen de Jesús Nazareno.
 Dos cálices y dos tazas de consagrar.
 Un terno, dos capas, veinte casullas, toda la ropa blanca.
 Capilla del Ecce Homo: cuadro con San Juan Bautista besando al Cordero.
 En lo alto del retablo: cuadro de la Virgen con el Niño (Cano?)
Iglesia y convento de San Diego:
Su pintoresco conjunto ha sufrido especialmente las iras de los marxistas, a pesar de haber sido utilizado por ellos con diversos fines.
“Listado de ornamentos y vasos sagrados y demás cosas de culto robados por los marxistas al convento de Alhama en el año 1936”.
 Imágenes: Purísima, Corazón de Jesús, San José (capilla del lado de la Epístola), San Pascual Bailón, San Francisco de Asís, San Pedro de Alcántara (copias de los de Mora en Santa Isabel de Granada), San Antonio de Padua, San Ramón Nonato, Virgen de los Dolores, dos Crucifijos, San Isidro Labrador, Santa Clara, Ntra. Sra. de la Cabeza, San Buenaventura, San Cayetano, San Francisco de Paula, Ntra. Sra. del Carmen, entre otras muchas. Varios Niños Jesús.
Según Gómez Moreno, poseía numerosas imágenes, todas de la escuela de los Mora.


 Cuadros: Descendimiento de la cruz, Virgen de Gracia, San Juan Evangelista escribiendo el Apocalipsis, contemplando a la Virgen aparecida en el cielo, Santo Domingo contemplando a la Virgen, compañero del anterior, Sagrada Familia, italiano, “y otras muchas copias”.
 Cuadros: Cristo crucificado, Eccehomo, Virgen de la Candelaria.
La ermita de los Remedios: convertida en almacén y vivienda. Su antecamarín convertido en cocina. Arrancados los retablos y altares y derribada la cruz de piedra que se erguía ante la portada.
Muy adornada en el siglo XVIII. Camarín de 1769.
Imagen de San Roque (s. XVI), San Sebastián, Ntra. Sra. de los Remedios.
 - La ermita de la Aurora:
 - Iglesia de Ntra. Sra. de las Angustias:
 - La ermita de la Virgen de la Peña de Francia:
 - La ermita de Ntra. Sra. de los Ángeles:

DOCUMENTACIÓN

PÉRDIDA DEL PATRIMONIO

Simultáneamente a los casos de violencia contra las personas, resultó afectada una gran parte de las propiedades y bienes eclesiásticos así como del patrimonio cultural asociado a las obras de arte en ornamentación, retablos, imágenes y lienzos, hechos que los autores católicos denominan "el martirio de las cosas".
Durante la contienda, resultaron destruidas 20.000 iglesias, entre ellas varias catedrales, incluyendo su patrimonio artístico y sus archivos tanto como resultado de las acciones revolucionarias como por efectos de bombardeos indiscriminados como el de Guernica y Durango.
En Cataluña, el Presidente de la Generalidad, Lluís Companys, durante una entrevista a finales de agosto de 1936 por una periodista de L'Oeuvre declaró al ser preguntado sobre la posibilidad de reanudar el culto católico
“...este problema no se plantea siquiera, porque todas las iglesias han sido destruidas”.
En Madrid se destruyeron casi todas las iglesias mientras que en la vecina localidad de Getafe el monumento al "Sagrado Corazón", situado en la cima del Cerro de los Ángeles, fue volado con dinamita el 7 de agosto de 1936.
Juan Manuel BARRIOS ROZÚA: “Las destrucciones iconoclastas durante la Guerra Civil y su papel en la propaganda franquista”, Investigaciones Históricas, Universidad de Valladolid, 2008.
- El contenido analítico brilla por su ausencia ()
- Lo que se consideraba funcional para la comunidad (edificios, orfebrería, e incluso vestiduras sacerdotales) no fue entregado a las llamas…
- A la hora de hablarnos de la autoría de los ataques iconoclastas los panfletos tampoco aportan información de interés, pues…no especifican el número de personas…la extracción social o la afiliación política…
- Utilizan una terminología general y deshumanizadora “horda marxista”, los “rojos”, “turbas revolucionarias”
- ¿Hacia quien iba dirigida esta literatura?
- Los panfletos sobre destrucción del patrimonio eclesiástico tenían como objetivo despertar el odio contra el enemigo republicano y justificar un castigo ejemplar.
- Pero esta propaganda tan cuidada en su presentación y costosa para unos tiempos de guerra y crisis económica estaba también destinada a los extranjeros.
- Los textos son reiterativos en su argumentación y las más de las veces breves
- La fotografía cambió la manera de entender la propaganda, destronando el texto escrito…
- El 19 de Febrero de 1937 se constituyó la Comisión Artística de Vanguardia de Granada, la cual recorrió los pueblos de la provincia que controlaban los franquistas para evaluar los destrozos causados en el patrimonio artístico…Dirigía dicha comisión Antonio Gallego Burín y participaron en ella los profesores Emilio Orozco Díaz y Jesús Bermúdez Pareja, el arquitecto y jefe de Falange local Francisco Prieto Moreno, el delineante Manuel Bueno y el fotógrafo Torres Molina.
- El primer resultado de esta labor fue el “Informe sobre las pérdidas…
- En el libro se recogen las destrucciones iconoclastas acaecidas desde la “anti-histórica” etapa comenzada el 14 de Abril de 1931…
- Esa referencia a “negociantes y aventureros”…entra en contradicción con…”fueron totalmente destruidos”.
- En Enero de 1938 se inauguró en la Lonja de Granada una exposición de imágenes y objetos de culto…
- Las exposiciones… tendrían su correlato en macabras rutas turísticas por los escenarios de la guerra,,,
- …aunque los franquistas no fueron tan rápidos como los republicanos, empezaron a adoptarse posturas más constructivas.
Considera propaganda franquista lo que fue una tarea altamente positiva, pues gracias a dichos “informes” conocemos de primera mano y hora la devastación del patrimonio artística.
Dice que solamente se cebaron en las imágenes religiosas por razones de ideología, pero que no la emprendieron ni con los edificios, ni orfebrería, ni ornamentos. ¡Craso error! Lo que él cree.
Juan Manuel BARRIOS ROZÚA: “Mofa e iconoclastia durante la Guerra Civil en la Diócesis de Granada: parodias e irreverencias”, Fundamentos de Antropología, nº 10 y 11, 2001.

José Manuel RODRIGUEZ PARDO: “El anticlericalismo y la iconoclastia durante la II República y la Guerra Civil española: ¿proceso de emancipación de la humanidad o fomento inusitado de la barbarie? Sevilla, Congreso de Filósofos jóvenes, 2003.

Causa General: El régimen franquista, promulgó la "Causa General Instruida por el Ministerio Fiscal sobre la dominación roja en España" por decreto del 26 de abril de 1940, con el fin de instruir «los hechos delictivos cometidos en todo el territorio nacional durante la dominación roja». La investigación se llevó a cabo de manera sistemática y detallada en toda España bajo la responsabilidad del fiscal jefe de la Causa General, figura establecida en 1943, y duró prácticamente hasta 1960.
La enorme documentación acumulada fue dividida en once piezas o capítulos, uno de ellos abierto expresamente bajo el epígrafe Persecución religiosa: Sacerdotes y religiosos asesinados y conventos destruidos o profanados. Las diócesis colaboraron con la Causa General mediante la labor del provisor de la Diócesis, encargado de suministrar los informes y recolectar los testimonios de los asesinatos y sus circunstancias.
Esta Causa, utilizada por la propaganda del régimen franquista para legitimar la sublevación contra la República y empleada como instrumento de represión, es desde entonces la única versión oficial de los hechos ofrecida a la sociedad, sin que tras la Transición, las autoridades democráticas hayan realizado una investigación imparcial que asegure el esclarecimiento de los hechos atribuidos y la responsabilidad de las personas condenadas sobre tales fundamentos.
Sin embargo, en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, las discrepancias entre la Santa Sede, que se había manifestado tímidamente en contra del fascismo y del nacionalsocialismo, y el régimen franquista, interrumpieron los procesos tempranos emprendidos de beatificación al pretender éste último, desde un interés político, que se realizaran de manera masiva.
Ley de Memoria Histórica: La Ley por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil y la Dictadura, más conocida como Ley de Memoria Histórica, es una ley española aprobada por elCongreso de los Diputados, el 31 de octubre de 2007,[1] [2]partiendo del texto del proyecto de ley previamente aprobado por el Consejo de Ministros el día 28 de julio de 2006, durante el mandato de José Luis Rodríguez Zapatero comoPresidente del Gobierno.
Incluye el reconocimiento de todas las víctimas de la Guerra Civil, las víctimas de la dictadura pero no la apertura de fosas comunes en las que aún yacen los restos de represaliados por los sublevados en la Guerra Civil, realizadas desde entidades privadas (como la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica -ARMH- y el Foro por la Memoria) ocomunidades autónomas.
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica-ARMH, pionera en la exhumación científica de fosas comunes de asesinados por la dictadura franquista, ha criticado que en su preámbulo el texto afirma que la memoria de las víctimas del franquismo es personal y familiar; negando de ese modo en su marco de planteamientos que los delitos del franquismo son cometidos contra toda la sociedad y la humanidad y el deber del Estado de practicar políticas públicas que garanticen a las víctimas de los delitos más graves que existen su derecho a la verdad, a la justicia y a la reparación.
La insatisfacción con el texto de la ley llevó a catorce asociaciones memorialistas a presentar una denuncia por cientos de desapariciones ante la Audiencia Nacional el 14 de diciembre de 2006. Igualmente, el Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias de Naciones Unidasse ha mostrado crítico con algunos aspectos de ella.

         


Intervención
de
don José Montero Corpas, historiador



(De izquierda a derecha) El autor, el prof. Juan Larios Larios y el historiador José Montero Corpas. Presentación en la Biblioteca de Andalucía (Granada)
         Agradezco al autor que me haya hecho copartícipe de la presentación de su libro sobre la historia de Alhama del siglo xx.
         En primer lugar, porque mis ancestros, por parte materna, eran naturales de Alhama y siempre he sentido una cierta predilección por esta ciudad.
         En segundo lugar porque el tema que trata el libro es un tanto arduo, aún poco asimilable por algunos y en cierta medida, tabú para otros. Las dificultades que encontramos los historiadores para sacar a la luz temas que la memoria pretende relegar, suelen ser ácidos y no del agrado de todos, pero esa labor nos corresponde y debemos hacerla desde la mas absoluta honestidad.
         Esta obra de Salvador sobre la Alhama contemporánea, nos va a mostrar el difícil transito de la preguerra, la guerra y el peor de todos: la posguerra, no solo por sus consecuencias, sino por las penalidades que se sufrieron tras un conflicto armado que quedó inherente en los familiares que la sufrieron.
         En este segundo volumen, salvador analiza en cinco puntos el periodo que comprende la posguerra: examina a través de las actas municipales el proceso de gobierno de la ciudad, desde el año 1937-1961. las corporaciones municipales gobernantes y las acciones que realizaron en este periodo en Alhama, personificadas en los mandatos de sus alcaldes:
         Don Miguel Morales Palazón (1940-1947).
         Don Antonio Morales Viñolo (1947-1949) y
         Don Jerónimo Castillo Prados (1949-1961)
         La reforma agraria, las nuevas poblaciones e infraestructuras que se llevaron a cabo en la ciudad durante este tiempo, con un amplio reportaje fotográfico.
         En un cuarto punto estudia la división azul a través de la experiencia de un alhameño, plasmada en dos libros: “Españoles en la URSS, 1959 y “Pesadilla roja” 1960, me estoy refiriendo a don Juan Negro Castro. con una amplia información de su paso por la División Azul y las vicisitudes que padeció en Rusia.
         El quinto apartado está dedicado a “los de la sierra”. En este voy a extenderme un poco más, porque es sobre lo que trabajo en la actualidad.
         Salvador, toma como base, al igual que lo han hecho otros autores, (pero que pocos lo han significado) el amplio informe que realiza el teniente coronel Limia Pérez sobre el bandolerismo en la provincia de Granada. en el que recopila datos de partidas y grupos de malhechores desde el año 1946. Junto a estudios anteriores llevados a cabo por historiadores como: Azuaga Rico, José Aurelio Romero, Jorge Marco y el más reciente de Eusebio Rodríguez.
         Las diferentes etapas del fenómeno así como sus inicios en la comarca de Alhama con la partida de los hermanos Benítez o el Collares que en enero del 45 asesinan en las chozas de Lorenzo al capitán Antonio Gil Ramírez y dejan malherido al guardia que lo acompañaba. tras un recorrido por las actuaciones de los distintos grupos en la comarca, así como a los testimonios y documentación recabada por las aportaciones que realizaron otros autores como el teniente coronel de la guardia civil don Francisco Aguado Sánchez y el que fuera comandante de puesto de benemérita de Alhama en la época que nos ocupa don Antonio Díaz Carmona que tratan en sus libros: “El maquis en España”, del primer autor y “Bandolerismo contemporáneo”1969, del segundo. Los testimonios de personajes que dejaron en sus manuscritos inéditos su impronta sobre el tema como es el caso de don Rafael Ortigosa Camacho “Otra memoria histórica”, junto a las entrevistas realizadas, que podemos consultar en el anexo del libro, conforman todo este capítulo en que el autor se hace e intenta dar respuesta, juicio y opinión a toda una serie de preguntas:
         ¿Dónde está el límite, la frontera, entre bandolero-guerrillero y a la inversa?
         ¿Es la ideología política la que mueve a esta gente a echarse al monte? o ¿quizá es ésta muy posterior?
         ¿Fueron “la gente de la sierra” unos prohombres que luchan de manera consciente para finiquitar el régimen de Franco?
la historiografía actual ha elevado al bandolero-guerrillero a mito y encumbrado a algunos de sus jefes al límite de protagonizar estudios sistemáticos y me atrevo a decir cuasi románticos como: los hermanos Quero, el Yatero, el Roberto, etc. a pesar del relato de sus peripecias en la sierra: extorsiones, robos, secuestros, asesinatos de sus propios compañeros, etc.
         ¿Se ha tenido en cuenta a las víctimas de estas acciones: campesinos, propietarios, guardias civiles, sus opiniones, sus puntos de vista sobre el fenómeno guerrillero?
         ¿Qué opinión tienen sobre la gente de la sierra, los familiares de los campesinos y propietarios que fueron secuestrados, extorsionados e incluso en algún caso asesinados? en este apartado Salvador, nos cuenta la propia experiencia de su abuelo Eduardo y su enfrentamiento con el grupo de “El Jorge”.
         ¿Se ha hecho una comparativa exhaustiva de todos los datos que conocemos: muertos de un lado y otro? campesinos asesinados. Fuerzas de la guardia civil y del ejército muertos en las refriegas. Bandoleros asesinados por sus compañeros, etc.
         El partido comunista, iniciador de este desatino allá por octubre de 1944 con la denominada y fracasada “Operación reconquista” con la inserción de un abundante grupo de exiliados republicanos para derrocar el régimen de Franco y su posterior abandono de la lucha. ¿Se le ha pedido a sus dirigente alguna declaración al respecto sobre el asunto. ¿ Ha asumido el PC alguna responsabilidad de estos actos?
         ¿La terminología que se utiliza es la adecuada?: bandolero, los de la sierra, guerrilleros, etc., se ajusta a la realidad o a caso son mas explicitas las nuevas terminologías aparecidas: ejército guerrillero, amigos en armas, guerrilla social, guerrilla política. ¿es tan amplia, compleja y diversa para asignarle tantos significados? o por el contrario es bastante más sencilla.
         En este apartado también hay una pormenorizada biografía de los alhameños que participaron en la guerrilla como fueron:
         Antonio Gómez Nieto (a) Catite (Gallardo) con la visión de su nieto en el apéndice documental.
Juan Arenas Ciruela (a) el Cornudo
Francisco Aguado (a) Mediokilo
José Navarrete Ortigosa (a) Espartillo (Celestino)
Miguel Padial Martín (a) Campanito (Raimundo)
Felipe cabello Maldonado (a) Alimentos, etc. También incluye algunos otros, aunque no de Alhama, tuvieron una estrecha relación en los grupos que formaron como es el caso de Antonio López Morales (a) Culito (Narciso) y Francisco Molina Cárdenas (a) el Chato de Salar (Jorge), etc.
         A todas estas incógnitas dará Salvador, su visión, que coincide en buena parte con la mía sobre el tema. Después de llevar revisadas las casi 60 causas de las 198 que dispongo pretendo realizar un estudio profundo sobre “los de la sierra”.
         Por tanto y para no extenderme considero que la nueva aportación de Salvador a la historia de Alhama, cierra con estos dos volúmenes un magnífico trabajo de recopilación y estudio al que une un elenco de imágenes que invaden la mayor parte de sus páginas y que considero indispensable en la biblioteca de cualquier alhameño y estudioso de este tema, que se precie de tal, y tenerlo como memoria gráfica y escrita de una época difícil y no muy conocida a nivel local y nacional.
Muchas gracias.


Una de las ilustraciones del libro que recoge el espacio de los ajusticiamientos marxistas
Intervención del profesor Montero Corpas, Biblioteca de Andalucía, Granada